Ahora párate, siéntate y piensa. Tienes que encontrar una solución, tres pasos a la derecha, uno hacia atrás, femoral, punta, talón. ¿A qué hemos venido? ¡A sudar! Punto en boca y gominola que no has de comer, déjala correr. Suena fácil, pero lo haces complicado solo para poder quejarte. Así que tendrás que buscar el equilibrio. Porque a fin de cuentas todo lo que merece la pena se consigue sudando la gota gorda, desde pillarle el punto a la tortilla o pintarse las uñas de la mano izquierda, hasta conseguir un aprobado en un examen de álgebra o que un gallego entienda a un andaluz (Lo último ya os digo yo que es poco probable, pero a veces pasa, pocas, pero pasa)
Entonces, llegados a este punto en que las cosas que merecen la pena no se suelen conseguir de la noche a la mañana, me reitero en que gominola que no has de comer déjala correr, como frase universal, aplicable a todo tipo de circunstancias, poseedora de la verdad absoluta y susceptible de quebrantarse.
Me encantas, me encantas y me encantas.
ResponderEliminarFirmado una gallega qe nunca entiende a los andaluces.
V
¡Gracias, gracias y gracias!
EliminarQuizá algún día los astros se alineen y podamos entender a los Ole Ole ;)
Eso es injusto, no pasa con todos los andaluces ~~
ResponderEliminarD
Claro que no pasa con todos, en los márgenes de la distribución normal también hay gente ;)
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